ONU advierte que ataques estadounidenses aumentan tensión en Medio Oriente
Tegucigalpa, 22 jun (AHN) Diferentes países del mundo reaccionaron con firmeza ante el ataque estadounidense contra las instalaciones nucleares de Irán, calificando la acción como una grave amenaza a la paz mundial y una violación flagrante del derecho internacional.
El bombardeo estadounidense tuvo como objetivo las instalaciones nucleares de Fordo, Natanz e Isfahán, lo que provocó una inmediata y generalizada ola de condenas por parte de la comunidad internacional.
Por su parte, el secretario general de la ONU, António Guterres, denunció que la acción estadounidense representa una “escalada peligrosa en una región que ya está al borde” del colapso, y advirtió que el conflicto, si se sale de control, podría tener consecuencias “catastróficas” para la humanidad.
“Estoy profundamente alarmado por el uso de la fuerza por parte de EE.UU. contra Irán. Es una amenaza directa a la paz y la seguridad internacionales”, declaró. Guterres y además instó a los Estados miembros a reducir tensiones y a respetar la Carta de las Naciones Unidas.
Desde Teherán, el ministro de Asuntos Exteriores iraní, Seyed Abbas Araghchi, acusó a Washington de cometer una “grave violación” del derecho internacional, la Carta de la ONU y el Tratado de No Proliferación Nuclear.
“Estados Unidos ha atacado instalaciones energéticas que son objeto de inspecciones internacionales, en un acto absolutamente injustificable”, aseguró.
Rusia, por su parte, se unió al coro de críticas y calificó el bombardeo como una “irresponsable decisión de someter el territorio de un Estado soberano a ataques con misiles y bombas”. Moscú advirtió que la ofensiva viola el derecho internacional y resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU.
China también condenó enérgicamente el ataque. En un comunicado oficial, su cancillería afirmó que las acciones de Washington.
“Han exacerbado las tensiones en Oriente Medio” y pidió a todas las partes, especialmente a Israel, “alcanzar un alto el fuego lo antes posible” y retomar el diálogo.
En el mundo árabe, la respuesta fue inmediata. Arabia Saudita, tradicional aliado de Estados Unidos, rechazó la “violación de la soberanía de Irán” y llamó a la moderación.
Desde El Líbano, el presidente Joseph Aoun expresó temor por una escalada que “amenace la seguridad de múltiples regiones”.
América Latina también hizo oír su voz. Bolivia y Cuba coincidieron en que el bombardeo estadounidense viola la Carta de la ONU y el derecho internacional.
El presidente venezolano, Nicolás Maduro, tildó el ataque de “acto de agresión ilegal e injustificable”, mientras que el mandatario chileno, Gabriel Boric, instó al respeto del derecho internacional humanitario. “El poder de EE.UU. no justifica que pueda vulnerar las reglas que como humanidad nos hemos dado”, sentenció.
JAS
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