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Tegucigalpa, 4 jul (AHN) La Agencia de las Naciones Unidas para los refugiados Palestinos —UNRWA— solicitó hoy un alto el fuego, la liberación de todos los rehenes y el levantamiento del asedio en la Franja de Gaza.
El organismo advierte que el combustible en Gaza alcanzó niveles críticamente bajos, por lo que se pone en riesgo la supervivencia de toda su población.
Además, enfatizaron que uno de los sectores más afectados es el de salud, el cual es devastado por los repetidos ataques del régimen israelí que deja numerosas instalaciones dañadas o destruidas y miles de profesionales médicos muertos, por lo que el sector se encuentra al borde del colapso total.
“Un quirófano está fuera de servicio, las sesiones de diálisis se han reducido de 3 a 2 días por semana por paciente y el plan de oxígeno se ha detenido, lo que obliga a depender de cilindros”, dijo la agencia.
Por su parte, Jan Egeland, secretario general del Consejo Noruego para los Refugiados declaró que el enclave había agotado hasta sus últimas reservas. “Se están racionando las últimas gotas para mantener los servicios básicos”.
Añadió que el combustible no es un asunto secundario, sino que es la columna vertebral de la ayuda humanitaria. “Negarlo colapsará todo el sistema, con consecuencias catastróficas para la población civil”.
Egeland, expresó que Gaza necesita alrededor de ocho millones de litros de diésel y 400.000 litros de benceno cada mes solo para mantener funcionando los servicios esenciales.
Por otra parte, Jorge Moreira da Silva, director de la Oficina de las Naciones Unidas de Servicios para Proyectos, afirmó que la agencia logró entregar 90,000 litros de combustible para proporcionar agua, saneamiento, higiene y telecomunicaciones en el norte de Gaza.
BRP
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